PANTEÓN MEMORIA VERDAD JUSTICIA
La figura del “desaparecido” concebida por la dictadura cívico militar ha pretendido quitarle el estatuto de “persona” a los seres humanos sistemáticamente secuestrados, asesinados y escondidos. Negando el cuerpo, la materia, intentando que la sociedad acepte la desmaterialización.
"No está, No es. Ni vivo, ni muerto: desaparecido” dijo el genocida.
Sin cuerpo no hay delito.
Olvidar.
El cuerpo de la persona que el terrorismo de Estado pretendió hacer desaparecer, funciona como certeza, como prueba. Cada compañero que encontramos, que recupera su identidad, delata el mismo método empleado con todos. Pone en evidencia el sistema siniestro con el que aún hoy pretenden poner en duda la existencia de su muerte, y de su vida.
La tarea del Equipo Argentino de Antropología Forense es encontrar e identificar los cuerpos, restituyendo al individuo su identidad, el derecho a sepultura a su familia que puede comenzar a elaborar el duelo necesario, y también a la sociedad, que reconstruye su verdad histórica.
La necesidad es individual y colectiva. Familiar y social. El lugar de sepultura debe ser colectivo, respondiendo también a su lucha. El sitio de sepultura debe funcionar como símbolo:
AQUÍ ESTÁN. Las personas no “desaparecen”, no se esfuman, ni se desmaterializan. Las asesinaron y las escondieron.
Y tarde o temprano, los cuerpos brotan como plantas buscando la luz, que ilumina lo oculto.
Como grito en el silencio.
El "Panteón Memoria Verdad Justicia" fue mi primer experiencia en la gestión y realización de una obra de participación colectiva, en donde los pedidos escritos, las firmas y los sellos ocupan mas tiempo que la producción artística, a veces.
Marucha Rave, Madre de Plaza de Mayo Línea Fundadora e integrante de la Comisión Municipal por la Memoria me convocó para pensar un proyecto artístico en función del lugar que estaban gestionando a través de la Comisión para que albergue y cuide los cuerpos encontrados e identificados por el EAAF en nuestra ciudad.
En principio, el edificio donado por el Municipio estaba en muy mal estado y se debía realizar un proyecto de reparación y puesta en valor para luego, poder pensar en la fachada artística. El proyecto realizado por Lucas Rindel fue ejecutado por la Cooperativa de Trabajo Comandante Hugo Chavez Frías y subsididado por el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación gracias a la gestión de Carlos Cervera.
Una vez diagramado y aprobado en la Comisión el diseño de fachada, recurrí a Victoria Carboni quien puso todo su conocimiento en traducir el boceto a las posibilidades del arte musivo. Pronto nos dimos cuenta que necesitaríamos muchas manos trabajando para poder cumplir con los plazos establecidos, lo que no resultó muy difícil ya que en Mar del Plata contamos con excelentes artistas del mosaico egresadas de la Escuela de Cerámica Rogelio Yrurtria y comprometidas con la construcción de memoria.
Luego de programar el sistema de trabajo, encargamos los azulejos esmaltados artesanalmente a Dale Azulejo de Marina Malnero y dividimos la fachada en partes para ser trabajadas con el método doble directo, que según nos explicó Victoria, consiste en el desarrollo del trabajo en taller sobre una malla de fibra de vidrio para su posterior traslado, instalación y detalles de terminación en el destino final.
Colaboraron con nosotras en la realización del mural mosaico: Paula Montero, Alejandra Bonnefón, Ana Paula Esteban, Mabel Díaz, Marina Malnero, Sabrina Calderín, Felisa Sanchez, Angelina Capasso, Patricia Pascual, María Hernández, y en la colocación y revoque de cemento coloreado Lucas Rindel con su equipo conformado por Adrián Da Silva, Maximiliano Ramadori y Sergio Fernandez.
Durante la tarea en el Cementerio nos visitaron amigos y familiares de desaparecidos apoyando nuestro trabajo con un mate, un bocadillo o una charla. Un día vino Jorge Cisneros junto a su compañera Analía Cristina Molinari. Jorge pidió participar colocando una tesela de azulejo en ese sector de la fachada que por su desnivel debía realizarse y colocarse in situ. Por la noche me llamó Analía para contarme lo importante que había sido para él poder poner su pedacito de azulejo por su hermano, como si fuese una "flor eterna". Esa flor que le fue negada. Nos dió la idea de convocar a los familiares a hacer lo mismo, a dejar un sector de la fachada especial para que cada familiar aporte su tesela. Es así que comenzaron a venir familiares especialmente para colocar un pedacito. Cada uno nos contaba su historia. Quién era su familiar, cómo era, qué hacía y como se lo llevaron. Sentimos que todo el sentido de este trabajo se resumía en ese encuentro, en esa charla, y en esa posibilidad de poner la flor que nos fue negada.
Junto con Mariano Morello diseñamos las señales de tránsito que instaló la Dirección de Tránsito de la Municipalidad de General Pueyrredon en las dos entradas al Cementerio (por Av. Paso y por calle Almafuerte) y también dentro del mismo sobre el camino principal.
Durante todo el proceso de producción Rubén Sanchez, Guido Triboulard, Paula Montero, Felisa Sanchez, Marcos Quinteros, Lucía Muraca, Juan Marco Candeloro y Marcelo Nuñez aportaron sus registros fotográficos gracias a los cuales podemos mostrar un paso a paso detallado en imágenes en la página de Facebook "Panteón Memoria Verdad Justicia".